domingo, 1 de marzo de 2009

Windows Live Hotmail

Tal como dije en mi entrada anterior,pienso publicar cada día un relato escrito por una mujer;el primero es de Inger Pedreáñez a quien conozco desde hace varios años y cosa curiosa,nos conocimos en San Carlos,ella vivía en Caracas,nos carteábamos,luego me fui a Caracas,vivíamos en la misma urbanización,dejamos de escribirnos y nos veíamos por pura casualidad,se casó,se mudó,tuvo 2 hijos,el mayor comenzó a estudiar en el colegio donde yo trabajaba,hablamos unas 5 veces cuando mucho,me vine a San Felipe,nos comunicamos por teléfono una vez,luego por correo electrónico y averiguando en facebock un día la encontré,cuando le hablé de las historias,inmediatamente envió esta,disfruten.


"Él la vio morir en sus brazos, creyendo que lo amaba.

Estaba llena de hambre, de odio, de poder… Cruzó por la puerta, más rápido que la historia que ellos, como pareja compartían. La bala no tenía nombre ni apellido, pero iluminó en un segundo los rostros a media luz de los enamorados para cortar el susurro de sus labios.

No hubo tiempo de dar explicaciones. Segundos antes, se habían acabado las palabras. No existe tiempo que mida la distancia entre dar respuesta a una voz que dice “te amo” y los recuerdos de discusiones atropelladas en los sentimientos."

No hay comentarios: